Los comienzos siempre suenan de forma agradable. Cada comienzo está lleno de esperanzas, de retos, y sobre todo de deseos de ser mejores en el campo que nos corresponde actuar.
Para los deportistas, estos retos no son fáciles. El deporte es una exigencia de hábitos. Hábitos que incluyen la alimentación, el descanso, la constante y disciplinada rutina de entrenamiento y la voluntad firme del aleta para la obtener logros reflejados en una medalla o diploma.
El canotaje de velocidad, en las modalidades de canoa o kayak, representan retos para los entrenadores y los atletas, sobre todo a la hora de medir con cronómetro los trabajos esperados.
Recordemos que el éxito en el deporte no es cuestión de suerte, es cuestión de un trabajo constante, que se va dando día a día, en los entrenamientos y el compromiso personal consigo mismo y con el equipo que representan.
Las familias, entrenadores y la comunidad ven con buenos ojos a todos aquellos que practican este deporte, porque subirse a una kayak o a una canoa, requiere valor. Y ese valor es quizá el principio de enfrentar los retos que la vida nos presenta.
Feliz año 2011.
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